Tarta de nectarina y calabaza

Esta tarta une el sabor de las nectarinas veraniegas con el color naranja típico de las calabazas otoñales, es cremosa y dulce, me ha encantado.
Un pastel perfecto para acompañar las infusiones y cafés de la tarde, sola o acompañada de nata o crema de queso dulce.

INGREDIENTES:

 200 g. de harina, 100 g. de azúcar, 100 g. de mantequilla, 3 huevos, 1 yema de huevo, pizca de sal, 250 g. de calabaza cacahuete, 400 g. de nectarinas, 100 g. de azucar moreno, 100 g. de nata, pizca de canela molida, 1 palito de canela en rama, 1 cucharadita de harina de maíz, medias nueces para decorar y azúcar glas.

ELABORACIÓN:

 amasar la harina, el azúcar, la mantequilla,1 huevo, la yema de huevo y la sal en un cuenco. Dejar la masa 1 hora en el frigorífico reposando.
Colocarla en un molde engrasado, formando un borde de unos 3 cm. de alto.
En una cazuelita, ponemos a cocer las nectarinas peladas y troceadas y la calabaza en trocitos también, con el palito de canela y un poco de azúcar.Cuando estén blanditas, escurrimos el líquido y hacemos un puré de nectarina y calabaza.

Separamos las yemas de las claras de los 2 huevos restantes. Montamos las claras a punto de nieve. Mezclamos las yemas con el azúcar moreno, la nata, la canela en polvo y la harina de maíz. Incorporamos el puré de nectarina-calabaza. Añadimos las claras a punto de nieve, con movimientos envolventes.

Vertemos en el molde, sobre la masa quebrada y horneamos  más o menos 50 minutos, hasta que al pinchar en el centro, salga limpio el palito.
Decoramos con medias nueces y azúcar glas.

Tiene un sabor muy especial e irresistible y me ha gustado más comerla fresquita.